Dominar la pronunciación en inglés es uno de los mayores desafíos para quienes estudian el idioma. Aunque tengas un buen vocabulario o entiendas la gramática, una mala pronunciación puede dificultar la comunicación. Por suerte, existen ejercicios sencillos y prácticos que te ayudarán a mejorar de forma notable.
¿Por qué es tan difícil la pronunciación en inglés?
El inglés contiene sonidos que no existen en español o catalán, lo que hace más complicado reproducirlos correctamente. Además, la relación entre la escritura y la pronunciación no siempre es evidente. Por eso, la práctica constante y la exposición diaria al idioma son esenciales.
Escucha, repite e imita
Una de las técnicas más eficaces para mejorar la pronunciación es escuchar y repetir. Hazlo con canciones, podcasts o series en versión original. Observa cómo se mueven los labios y la lengua de los hablantes, y presta atención al ritmo y la entonación.
Trata de imitar el acento y la melodía de las frases, como si fueras un actor. Este ejercicio mejora tu pronunciación, tu fluidez y tu seguridad al hablar.
Ejercicios prácticos para sonar más natural
Dedica unos minutos al día a practicar pares mínimos, es decir, palabras que se diferencian solo por un sonido, como “ship” y “sheep” o “think” y “thank”. Repetirlas delante del espejo te ayudará a controlar tus movimientos faciales y articulatorios.
Otra opción divertida son los tongue twisters (trabalenguas), ideales para ganar agilidad y coordinación al hablar.
Grábate y corrige tus errores
Un recurso muy útil es grabarte mientras lees o hablas en inglés. Después, escucha la grabación y compárala con la voz de un nativo. Detectarás fácilmente qué sonidos debes mejorar y podrás medir tu progreso semana a semana.
En Tower English te ayudamos a hablar con confianza
En Tower English trabajamos la pronunciación desde un enfoque natural y práctico, adaptado a cada nivel. A través de actividades comunicativas, ayudamos a que los alumnos ganen seguridad y consigan una pronunciación clara, fluida y auténtica.